Sobre Las cartas de Gustavo Adolfo Bécquer. A una mujer
“¿Quieres saber lo que es el amor? Recógete dentro de ti misma, y si es verdad que lo abrigas en tu alma, siéntelo y lo comprenderás, pero no me lo preguntes”.
En las cuatro cartas A una mujer, Gustavo Adolfo Bécquer (Sevilla, 1836-Madrid, 1870) desnuda su razón poética. No nos dejemos engañar por su formato epistolar: aunque se trata de una obra en prosa, el autor expone brevemente y con gran arte y oficio, la razón de ser de la lírica, del amor romántico y de la religión. Junto con Desde mi celda, otra serie de cartas en las que el exotismo y la brujería ocupan un lugar de preeminencia, A una mujer completa la serie de obras epistolares de Bécquer.
Con cadencia romántica y a través de diálogos imaginarios con su amada, en el curso de cuatro cartas toman forma reflexiones de corte filosófico. Bécquer no solo responde a la pregunta de qué es la poesía; aborda los desvelos de sus antecesores en el arte poético, como el vínculo existencial entre sentimiento y pensamiento, desvelo de filósofos españoles que le siguieron, como el venerable Miguel de Unamuno.